El secreto de tu ausencia me susurra la palabra que buscaba,
la libertad del alma que no tiene precio.
El abrazo de despedidas ignoradas se desvanece
para darle espacio a un sinsabor que sabe a gloria.
El no tenerte es todo lo que tengo,
y sin embargo con ello se llena mi espiritu.
La alegria del no desconsuelo me estalla en el cielo de la boca
y las ventajas de tu partida es lo que sueño despierta y dormida.
Que suerte que te largaras, finalmente descanso en mi cama.